La meditación de pie es una técnica poderosa que produce resultados mejores que la meditación sentada.

Muchos meditadores que no obtienen resultado meditando sentado, pueden lograr progreso asombroso si practican de pie.

La meditación de pie es propia del arte marcial chino y la medicina china tradicional.

Muy pocos occidentales conocen esta técnica.

Pero hace poco hallé un artículo de un británico practicante de Tai Chi, que hablaba de su experiencia con una meditación de pie que él mismo inventó:

La meditación de pie es más fácil y más efectiva, según el electro encefalograma

En el artículo publicado en Medium, el autor dice que tenía problema para meditar bien:

Aunque practicaba de forma regular, muchas veces sentía el deseo de dormir, o se perdía en la ensoñación, cuando intentaba meditar.

Sin embargo, si medita de pie, es raro que suceda esto.

Porque cuando lo hace de pie, se necesita menos tiempo para lograr la tranquilidad y la concentración profunda.

Incluso midió sus ondas cerebrales con un equipo de electro-encefalograma para comparar los resultados de la meditación sentada y la meditación de pie.

Se mostró que cuando meditaba de pie, entraba rápidamente en el estado de calma y pasó 90% del tiempo en este estado.

Mientras con la meditación sentada sólo logró experimentar el estado de calma 51% del tiempo.

El artículo muestra el gráfico del encefalograma, que no incluyo aqui por respetar el derecho del autor.

Pero puedes verlo en el artículo con el ensalce que mostré arriba.

¿Por qué es tan efectiva la meditación de pie?

Una de las razones (entre otras) por las que la meditación de pie es tan efectiva y poderosa es porque activa la energía vital o Qi (se pronuncia como «chi»).

La energía Qi es un elemento fundamental de la medicina china tradicional.

Y es la base de la acupuntura.

Las personas que tienen abundante Qi circulando en el cuerpo, gozan de excelente salud física y mental.

También tienen sus facultades intelectuales en óptima condición.

Con la meditación se puede activar y circular la energía Qi en los diversos canales de energía en el cuerpo entero.

La circulación de la energía se manifiesta como una corriente de calor, o sensación de corriente eléctrica, a veces acompañadas de vibraciones musculares.

Es algo real; no es producto de la imaginación o “efecto psicológico”.

Li Shizhen (1518 -1593), uno de los médicos chinos más respetados en toda la historia china, publicó un libro titulado Los 8 canales de energía.

En el libro dijo: “Sólo quienes meditan pueden observar el paisaje y los canales (de energía) internos”.

Quiere decir que para ejercer la medicina, debe conocer los canales de energía; y para conocer los canales de energía, debe practicar la meditación.

Existe muchas técnicas de meditación para activar y circular la energía.

Pero generalmente requieren largo tiempo de práctica ardua.

Muchos meditadores practican durante largos años sin lograr sentir la energía.

Pero se puede lograr resultado más rápido si practican la meditación de pie.

De hecho, algunos maestros experimentados suelen decir a sus alumnos que practiquen de pie, cuando ven que no obtienen progreso con las meditación sentada.

Algunos practicantes logran percibir y activar la energía con facilidad y de forma relativamente rápida, cuando meditan de pie.

Otros, aunque no logran sentir la energía de forma evidente, se vuelven más fuertes, saludables y despiertos.  Tienen más vigor y fortaleza física.

Mejoran su salud, e incluso podrían sanarse de algunas enfermedades.

Esto es porque ahora hay más energía Qi circulando bien en su cuerpo, aunque no la sientan de forma evidente.

Meditación de pie en el arte marcial y la medicina china

La meditación de pie se originó hace varios milenios en la China Antigua.

En algunos descubrimientos arqueológicos de hace 5 mil años se han encontrado los dibujos de las personas practicando la meditación de pie.

Un libro de medicina china titulado Canon Interno del Emperador Amarillo, escrito hace más de dos mil años, contiene algunas descripciones de la meditación de pie.

Más tarde, la técnica fue adoptada por los artistas marciales.  Y se convirtió en una práctica fundamental y propia del arte marcial chino (Kung Fu).

En las escuelas tradicionales de arte marcial en China, se exigía que los discípulos practicaran la mediación de pie durante 3 años, antes de empezar a aprender las técnicas de combate.

Además de cultivar la energía Qi para mejorar la salud, la meditación de pie también permite fortalecer las piernas y mejorar el equilibrio, que son importantes para la habilidad en el combate.

Los médicos chinos también recomiendan su práctica.  Porque la técnica está de acuerdo con un principio de la medicina china: cultivar la energía Qi por medio de los ejercicios, para mejorar la salud y sanar las enfermedades.

Foto de Bruce Lee meditando de pie

Bruce Lee es considerado el artista marcial más grande en la época moderna.

Tengo un eBook con una foto inédita de Bruce Lee meditando de pie, en una postura de meditación propia del arte marcial chino.

También verás otras celebridades meditando: J Balvin, Steve Jobs, Maluma, Jennifer López, Ricky Martin, Eva Longoria, Will Smith, The Beatles (compañeros de John Lennon), y otros.

En el eBook te diré las técnicas que practican algunos de estos personajes famosos.

Y en qué páginas de mi sitio puedes aprender estas técnicas de forma gratuita.

Portada del eBook Famosos que meditan, de Yuan Yu Liao

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Una técnica simple de meditación de pie

Hay muchas técnicas de meditación de pie.

Algunas son muy avanzadas que permiten activar y circular la energía Qi de forma rápida.

Muchas de estas técnicas se practican en combinación con los ejercicios respiratorios, y algunos movimientos corporales.

Incluso hay técnicas que canalizan la energía y estimulan el funcionamiento cerebral con los movimientos de los dedos.

Estas técnicas sólo se deben practicar bajo la guía de un maestro experimentado.

Porque activar y circular la energía es un asunto serio.  Debe practicar de forma correcta.

Si comete un error, podría tener efecto adverso para la salud e incluso para el cerebro.

Aquí te enseño una técnica muy básica y simple, que cualquier persona puede practicar con seguridad.

Importante: si tienes cualquier problema de salud, de las rodillas, las piernas o los pies, debes solicitar la autorización de tu médico antes de practicar la meditación de pie.

Postura para la meditación de pie

1. Practica con zapatos deportivos cómodos.

Evita los zapatos duros y los tacones altos.

2. Párate con los pies separados a una distancia del mismo ancho de los hombros.

Las puntas de los pies apuntando hacia delante.

3. Dobla ligeramente las rodillas.

Durante los primeros días, dobla sólo muy ligeramente.

Con la práctica, podrás doblar gradualmente más las rodillas; pero nunca deben pasar más allá de las puntas de los pies.

Los principiantes deben doblar las rodillas muy ligeramente, porque si las doblan mucho, se cansarán pronto; y no podrán permanecer en la postura cómodamente durante mucho tiempo.

Por tanto, basta con doblar muy ligeramente, para que las piernas no estén totalmente rectas.

Mantén tu espalda derecha

Ten cuidado de que el abdomen no esté echado hacia delante.

Además, el trasero no debe estar echado hacia atrás.

Para lograrlo: trata de rotar tu coxis hacia abajo y adelante, y mover tu ombligo hacia atrás.

Al hacer esto, se elimina la curva de la parte baja de tu espalda (se vuelve recta).

Para que entiendas mejor y sepas cómo hacerlo, vamos a practicar con una pared:

Ponte de espalda contra una pared.

Pega tu espalda y tus glúteos a la pared.

Pega también tus pantorrillas y tobillos a la pared, si es posible.

Notarás un espacio entre tu espalda baja y la pared: puedes meter tu mano entre este espacio (ve figura abajo):

Ejercicio preparatorio para meditación de pie

Trata de eliminar el espacio entre la espalda baja y la pared.  Esto es, eliminar la curva de la espalda baja.

La forma de lograrlo es:

Rota tu coxis hacia abajo y hacia delante; y al mismo tiempo echa tu ombligo atrás.

Para hacer esto, tendrás que doblar ligeramente tus rodillas.  Especialmente si tus tobillos están pegados a la pared.

Después de rotar el coxis hacia delante, y el ombligo hacia atrás, tu espalda baja se vuelve recta.

Elimina su curva, y se pega a la pared.

Ahora ya no hay espacio y no puede meter tu mano entre la espalda baja y la pared.

Mantente en esta postura contando 10 exhalaciones.

Es bueno practicar este ejercicio una vez, antes de hacer la meditación de pie, durante los primeros días, para acostumbrarte a mantener tu espalda derecha; especialmente la parta baja.

Cuando empiezas a practicar la meditación de pie, mantén tu espalda derecha haciendo los siguientes:

  • Párate de forma relajada, con la espalda derecha.
  • Dobla ligeramente las rodillas, manteniendo siempre la espalda derecha.
  • Trata de rotar tu coxis hacia abajo y adelante, al mismo tiempo echa el ombligo atrás, mientras dobla ligeramente las rodillas.

¿Por qué debo mantener la espalda derecha?

En el cuerpo humano hay dos canales principales de energía.

Uno está en la parte frontal: baja desde la cabeza, pasando por la garganta, el pecho, el abdomen hasta el perineo (la parte entre el ano y el genital).

Otro canal está en la espalda.  Sube desde el perineo hasta la cabeza, pasando por el coxis y la columna vertebral.

El perineo es un centro energético muy importante.  Está relacionado con la energía sexual.

Cuando un meditador activa la energía, muchas veces puede sentir la vibración y calor en la zona del perineo.

Las vibraciones son similares a las que uno experimenta durante un orgasmo.  Muchas personas incluso afirman que son más intensas y más placenteras.

Algunos hombres pueden sentir que se mueven suavemente sus testículos.

Algunos pueden tener erecciones espontáneas durante la meditación, aun sin recibir ningún estímulo sexual físico o psicológico.

Esto es porque el genital está conectado con un canal de energía importante.

Cuando la energía corre en este canal, podría provocar la erección.

Por otra parte, la parte baja de la espalda, justamente detrás del ombligo, es otro centro importante de energía: en chino se llama Ming Men, que significa «la Puerta de Vida».

Para facilitar la circulación de la energía, debe mantener derecha la parte baja de la espalda.

Esto permite que la energía del perineo pase arriba a través de la Puerta de Vida, hasta llegar a la cabeza.

Ve figura abajo:

Los puntos negros son los centros de energía más importantes.

Las líneas con flechas indican la circulacion de la energía en los dos canales: sube por la espalda; baja por la parte frontal.

Gráfico de la circulación de energía

Coloca tus manos sobre el bajo vientre

Coloca tus manos una encima de la otra, cruzando los pulgares.

Cubre el centro de tu bajo vientre con las dos manos cruzadas.

Posición de las manos para meditación de pie

Cada vez que practiques, intercambia la posición de las dos manos: si hoy la mano izquierda está fuera, mañana coloca la derecha fuera.

El centro del bajo vientre es un lugar a una distancia equidistante entre el ombligo y los huesos púbicos.

Es el centro de energía más importante del cuerpo humano.

Se llama Dantian en chino (se pronuncia “dan tien” en español).

Dantian se llama Hara en Japonés.

Los japoneses, especialmente los samuráis, tenían una forma suprema de suicidarse para salvar su honor, denominada harakiri.

Significa cortar el Hara (bajo vientre).

Cortar el bajo vientre es una forma lenta y dolorosa de morir.

Pero los samuráis lo hacen, porque saben que el Hara es el centro de energía más importante del hombre.

¿Por qué cubrir el Dantian con las manos?

Esto ayuda a acumular la energía en el Dantian.

Las manos hacen dirigir tu atención hacía el Dantian.  La energía tiende a concentrarse en donde uno pone la atención.

Además, las palmas de las manos también emiten energía.  Al transmitir la energía de las manos al Dantian, éste aumenta su reserva energética.

Las manos sobre el Dantian también facilitan la respiración abdominal:

Eventualmente podrás sentir el movimiento de tu bajo vientre cuando respiras.

Después de practicar cierto tiempo, tus respiraciones se harán profundas.

Y podrás hacer las respiraciones abdominales: tu vientre se expande cuando inhalas, y se contrae cuando exhalas.

Entonces podrás sentir el movimiento de tu vientre en cada respiración.

Pero todos los anteriores deben suceder espontáneamente.

No es necesario (y no debe) imaginar que estás acumulando la energía en el Dantian.

Y no es necesario hacer la respiración abdominal de forma intencionada.

Sólo respira de forma natural y espontánea.  Eventualmente harás la respiración abdominal cuando hayas alcanzado cierto nivel de progreso.

Relaja todo tu cuerpo

Cierra tus ojos.

Relaja tu cuerpo entero.

Conserva sólo la fuerza necesaria para mantener la postura.  Pero elimina cualquier tensión innecesaria.

Afloja tu entrecejos: no debes fruncir las cejas. 

Relaja la boca: Los dientes no deben estar apretados.

Algunas personas pueden tener los labios entreabiertos cuando la boca está relajada.

Relaja los hombros: no deben estar levantados.

En fin, relájate y elimina toda la fuerza y tensión innecesaria.

Sólo conserva la fuerza indispensable para mantener la postura.

Resumen de la postura de meditación de pie

1. Párate con la espalda derecha.

Los pies separados a una distancia igual al ancho de los hombros.

Las puntas de los pies apuntando hacia delante.

2. Dobla ligeramente las rodillas (muy ligeramente), para bajar tu cuerpo manteniendo la espalda derecha.

3. Al doblar las rodillas, rota el coxis hacia abajo y adelante; y el ombligo hacia atrás.

4. Cubre tu bajo vientre con tus manos con los pulgares cruzados.

Intercambia la posición de las dos manos cada vez que medites.

5. Cierra los ojos.

6. Relaja todo el cuerpo (especialmente no levantes los hombros). 

Ve figura abajo:

Mujer practicando la meditación de pie

Recuerda doblar las rodillas solo muy ligeramente.

Nuestra amiga en la foto dobla bastante sus rodillas, porque tiene mucho tiempo de práctica.

Los principiantes deben doblar muy poco.

Podrás doblar más las rodillas cuando te hayas acostumbrado a la postura y tus piernas estén más fuertes.

Las rodillas nunca deben sobrepasar las puntas de los pies. 

Cómo meditar con la meditación de pie

Después de colocarte en la postura, cuenta las respiraciones en tu mente:

1. Cuando exhalas, cuenta un número en tu mente; empezando desde 1 hasta el número que puedas llegar.

La primera vez que exhalas, cuenta “Uno”.

La segunda vez cuenta “Dos”, así sucesivamente.

2. A partir del número 101, debes contar cuando inhalas y cuando exhalas:

Para contar el número 101:

Di en tu mente “ciento” cuando inhalas; luego di en tu mente “Uno” cuando exhalas.

Para el número 354:

Di “Trescientos” en tu mente cuando inhalas.

Di “Cincuenta y cuatro” en tu mente cuando exhalas.

3. Puedes contar hasta cualquier número; hasta que desees terminar.

Cómo meditar durante largo tiempo

¿A qué hora practico la meditación de pie?

Puedes practicarla a cualquier hora.

Muchas personas practican de noche antes de dormir, o una o dos horas antes de dormir.

Esto le ayuda a dormir mejor.

Pero algunas (muy pocas) personas podrían tener dificultad para dormir si practican de noche.  Si es tu caso, no lo hagas de noche muy cerca de la hora de dormir.

Normalmente la meditación ayuda a dormir mejor.

Meditar antes de dormir facilita conciliar el sueño.

Pero la meditación de pie activa y circula la energía; tiene un efecto estimulante.

Esto es especialmente cierto si practicas con las rodillas más dobladas, que ejercita más los músculos de los muslos y la piernas.  Y estimula más la energía.

Por esta razón algunas personas podrían tener dificultad para dormir si practican la meditación de pie antes de dormir.

¿Cuánto tiempo debo practicar?

Para obtener óptimo beneficio, es recomendable practicar 30 minutos continuos.

No es necesario llegar a este tiempo durante los primeros días.

Aumenta el tiempo de forma gradual.

En China y Taiwán hay algunos practicantes que practican 8 horas cada día.

Normalmente practican 4 veces por día, cada vez dos horas.

En la China Antigua, un día estaba dividido en 12 segmentos llamados Shi Chen.

Un Shi Chen equivale a dos horas.

Los maestros de la meditación de pie exigían que los discípulos practicaran durante un Shi Chen cada vez, que sería dos horas.

Algunos dicen que para obtener óptimo resultado, por ejemplo: para sanar algunas enfermedades complicadas o para llegar a un nivel muy alto en el arte marcial, deben practicar 8 horas diarias.

Practicar 8 horas diarias parece increíbles. Pero es fácil para quienes hayan dominado bien la técnica y disfruten de sus beneficios.

Muchos practicantes experimentan euforia, placer, felicidad y sensación de gran bienestar cuando practican.

Y experimentan una mejora asombrosa de su energía, sus facultades intelectuales y su bienestar psicológico después de practicar.

Entonces sienten el deseo de practicar durante largo tiempo.

Algunos especulan que los monjes del Templo Shaolin (la escuela de arte marcial más importante en China) pueden mantener el celibato gracias a la práctica de la meditación de pie.

Ya que con la meditación podrían experimentar más placer que el sexo.

Para la gente normal, no es necesario practicar tanto tiempo.

Trata de meditar durante media hora continua.

Y no es necesario llegar a media hora de inmediato.

Progresa de forma gradual.  Aumenta un poco el tiempo cada día (abajo verás cómo):

Progresa de forma gradual

Empieza por contar hasta quizás 50 o 100, o cualquier número que te sea cómodo.

Luego cada día aumenta unos números, hasta quizás 400 o 500 (o más, si te gusta).

Al llegar a estos números, ya estarías meditando durante 30 a 40 minutos.

Cómo aumentar el tiempo de meditación de forma fácil

Algunas personas muy entusiastas tratan de avanzar con rapidez, llegando a meditar durante media hora o más en dos o tres días; o incluso desde el primer día.

Entonces podrían sentir malestar o fatiga el próximo día.

Tengo un alumno que había practicado varias técnicas de meditación que le enseñé antes, cuando aprendió esta meditación de pie, meditó 37 minutos el primer día (contó hasta 500).

El día siguiente sintió un cansancio físico y mental.

Físicamente sentía que tenía mucho sueño.

Y mentalmente, dijo que era una desgana o “flojera”.  No tenía deseo de trabajar.

Sabía que era por la práctica de la meditación de pie, decidió suspender la práctica.

Pero el próximo día sintió de maravilla desde que se levantó: tenía mucha energía y vigor.

Su cerebro muy ágil y despierto.

Sintió gran entusiasmo y deseo de trabajar mucho.

Pudo trabajar el día entero de forma eficiente y productiva.

Sabía que todo esto era por la práctica de la meditación de pie que hizo dos días antes (pues el día anterior la suspendió).

Entendió que la meditación de pie es una práctica poderosa, que mejora su estado físico y mental de forma extraordinaria.

Pero en exceso podría causar fatiga.

Ese día volvió a practicar, pero redujo el tiempo: practicó sólo 26 minutos, contando hasta 400.

El próximo día sintió muy bien. Con su estado físico y mental en óptima condición.

Desde entonces practicaba todos los días, contando hasta 400.

Si sientes fatiga (física o mental) después de practicar la meditación de pie durante largo tiempo, reduce el tiempo de práctica la próxima vez.

La meditación de pie permite meditar con la mente despierta, sin soñolencia

Muchos meditadores se quejan de sentir sueño o hasta llegan a dormitar después de meditar un tiempo relativamente largo.

Especialmente si meditan cuando están cansados, después de almorzar, o durante las últimas horas de la noche.

Si practican la meditación de pie, nunca tendrán este problema, ya que uno no puede dormir de pie.

Por tanto, la meditación de pie es la mejor forma de mantener la mente despierta durante la meditación.

Y es el remedio ideal para quienes sienten soñolencia cuando meditan.

La meditación de pie permite ejercitar la mente en el trance meditativo durante largo tiempo

Cuando uno medita durante un tiempo suficientemente largo, podría llegar a experimentar un estado de relajación, quietud y concentración profunda.

Al estar tan tranquilo, uno tiene la sensación de que va a quedar dormido, pero no llega a dormir.

O parece que está durmiendo, pero no lo está.

En la terminología de la ciencia de la meditación, esto se llama “si shui fie shui”(似睡非睡)en chino.

El primer carácter (si) significa “parecer”.

El segundo y el cuarto carácter (shui) significa “dormir”.

El tercero (fie) significa “no”.

Los 4 caracteres juntos significan “parece durmiendo; no está durmiendo”

Es un término que se utiliza mucho entre los meditadores, para describir un estado de trance meditativo profundo.

Muchos meditadores, especialmente los principiantes, no pueden experimentar este estado durante largo tiempo.

Porque pronto sentirán mucho sueño y tienden a dormitar.

Si practican la meditación de pie, esto no sucede, porque uno no queda dormido de pie.

Entonces puede permanecer en el trance meditativo durante largo tiempo: la mente está relajada, tranquila y quieta, como si fuera a dormir; pero nunca llega a dormir.

Este es un estado intermedio entre el sueño y la vigilia; entre la mente inconsciente y la consciente.

En este estado, el cerebro tiene abundante ondas cerebrales alfa y theta, que abren el acceso al inconsciente.

Optimiza tus ondas cerebrales para mejorar tu cerebro

La gente normal sólo experimenta este estado brevemente en el momento antes de dormir por la noche.

Pero con la meditación de pie podemos permanecer en este estado durante largo tiempo.

Si uno ejercita su mente en este estado, puede mejorar grandemente su concentración, su disciplina, su habilidad de pensar con claridad, y todas sus facultades mentales.

¿Y cómo ejercitar la mente en este estado?

Muy fácil: La meditación de pie exige que cuente las respiraciones hasta centenares de números.

Es una excelente forma de ejercitar la mene. Ya que uno debe concentrarse bien para contar los números en coordinación con las respiraciones de forma correcta, sin equivocarse.

Al entrenar tu mente en este estado semi-despierto y semi-dormido, puedes lograr una mejora asombrosa de tu funcionamiento cerebral.

Conclusión

La meditación de pie es propia del arte marcial chino y la medicina china tradicional.

No sólo mejora tu concentración y todas tus facultades mentales, sino también tu salud física y te hace más fuerte, porque activa y circula la energía vital (Qi).

Para practicarla, párate con la espalda derecha, rotando el coxis hacia abajo y adelante.

Dobla ligeramente las rodillas.

Relaja todo tu cuerpo.

Luego cuenta tus respiraciones desde 1 hasta el número que puedas llegar.

¿Sentías sueño cuando meditabas?

¿No obtenías buen resultado con la meditación sentada?

Con la meditación de pie podrás lograr mejor resultado.

¿Crees que es buena idea probarla?

Comparte tus experiencias dejando un comentario abajo:

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