Disfruta del mismo beneficio de meditación escuchando un audio

Puedes experimentar efectos similares a meditación escuchando un audio MP3 con tu celular o reproductor MP3.

Esos audios alteran tus ondas cerebrales para que tu cerebro entre en el estado deseado (gamma, beta, alfa, theta o delta.).  Si no sabes qué son los estados mentales, lee este post: Mejora tu cerebro optimizando tus ondas cerebrales.

Estos audios son generados por computadoras (ordenadores) con softwares diseñados para este propósito.  Tienen varios tipos.

Según mi experiencia y algunos expertos más experimentados, el más efectivo es el sonido isocrónico.

«Isocrónico» significa que se repite a ritmo constante con intervalos regulares.  Por ejemplo: El movimiento del péndulo y el sonido de tic-tac del reloj, son isocrónicos porque se repiten cada segundo.

El sonido isocrónico se repite X veces por segundo según la frecuencia (Hz) de ondas cerebrales que se desea inducir.

Por ejemplo: si escuchas el sonido que se repite 5 veces por segundo, tus ondas cerebrales tiende a tener la frecuencia de alrededor de 5 Hz también.  Entonces entras en el estado theta que tiene el rango de 4 a 7 Hz.

Tecnología fascinante de la máquina de la mente

En las últimas décadas del siglo pasado se empezaron a utilizar sonidos y luces para alterar las ondas cerebrales para inducir estado mentales específico.

El uso de luces es similar al sonido isocrónico: si miras a una luz que enciende y apaga a un ritmo de 10 veces por segundo, por ejemplo, tus ondas cerebrales tenderán a tener la frecuencia de 10Hz (correspondiente al estado alfa, que favorece la relajación y memorización).

En el 1986 Michael Hutchison publicó el libro Mega Brain: New Tools And Techniques For Brain Growth And Mind Expansion (Mega Cerebro: Nuevas Herramientas Y Técnicas Para Crecer El Cerebro Y Expandir La Mente), en el cual detallaba diversos equipos y tecnologías para mejorar el funcionamiento cerebral.

Entonces empezó la moda de mind machine (máquina de la mente).  En TV y muchas revistas se podían ver anuncios que promovían estos productos.

Puedes ver un ejemplo aquí.

Cuando vi estos anuncios, me quedé fascinado.  Porque siempre me apasionaban las técnicas de desarrollo mental.

Mi aventura con las máquinas de luz y sonido para meditar

Compré unos cassettes que prometían el efecto de «zen instantáneo»: con solo escucharlo durantes unos segundos se podría entrar en el estado mental que los monjes zen y los yoguis alcanzarían con décadas de entrenamientos. 

Después de probar los cassettes, comprobé que ciertamente funcionaban.  Entonces decidí comprar una máquina de sonido y luz: Un dispositivo con unos auriculares y gafas.

Los auriculares emitían sonido.  Las gafas producían luces que se encendían y apagaban en forma intermitente (isocrónica).

Estos equipos venían con varios programas predeterminados, para inducir diversos estados mentales con propósitos específicos: para relajarse, dormir mejor, mejorar la concentración, facilitar el aprendizaje, desarrollar la creatividad, etc.

Además el usuario podía diseñar sus propios programas según sus preferencias.

Durante un año dejé de practicar las técnicas tradicionales de meditación.  Me dediqué a usar estos productos, pensando que debería aprovechar las ventajas de la alta tecnología.

Había comentado con algunos amigos practicantes de meditación, y todos se reían de mí.  Me criticaban diciendo que esto era anti-natural; era una herejía; que podría tener efecto adverso, etc.

Pero me sentía a gusto con mi meditación electrónica, pues siempre he sido de mentalidad abierta.  Me gusta la innovación y probar cosas nuevas.

Además estaba convencido de lo siguiente:

La tecnología es buena y da ventaja a quienes la usan (?)

Soy informático (ingeniero en sistemas computacionales).  Empecé a usar la computadora (ordenador) personal desde que IBM lanzó su primer PC en el 1981 cuando yo tenía veintitantos años.

Me gustaba hacer cosas con mi PC:  Mientras la gente anotaba sus actividades pendientes en una agenda de 365 páginas, yo usaba Sidekick (uno de los primeros software de agenda para PC).

Mientras la gente escribía sus documentos con máquinas de escribir, yo usaba WordStart (un procesador de textos primitivo, cuando aún no había Word).

Hacía las cosas en PC con más rapidez y mejor calidad que la gente que aún desconocía esta tecnología:

Los documentos que yo imprimía con PC era de una calidad envidiable para la gente que escribía con la máquina de escribir: Yo podía usar tipografía negrita e itálica y hasta cambiar el tamaño de las letras; ellos no.

Yo podía corregir los errores ortográficos con el software.  Ellos no.

Yo imprimía un documento nítido de calidad impecable, mientras ellos tenían  correcciones con líquido corrector o gomas de borrar en sus documentos.

Estaba convencido de que la tecnología es buena.  Cuando uno utiliza una tecnología nueva podría tener grandes ventajas frente a la gente que no la utilice.

Así, con esta filosofía, me dediqué a meditar con los dispositivos electrónicos, abandonando las técnicas de meditación tradicionales.

Lo hice durante un año, hasta que me di cuenta de lo siguiente:

La meditación tradicional es superior a la máquina de la mente

Después de unos meses empecé a tener gripes y tos con frecuencia.

La gripe consistía en sensación de malestar, escalofrío y dolores en el cuerpo que duraban unos días.

La tos era persistente que tardaba muchos días en sanar, a pesar de tomar medicina.

Cuando finalmente me sanaba, duraba poco tiempo antes de volver a sufrir otro episodio de gripe o tos.

Un día cuando me reposaba en cama por gripe.  Pensé que había pedido permiso en el trabajo por enfermedad en tres ocasiones.   ¡Era preocupante! pues nunca había faltado al trabajo por enfermedad antes.

Reflexioné y me di cuenta de que los problemas de mi salud se debían a dos razones:

Primero: Había dejado de practicar la meditación energética. 

Siempre gozaba de excelente salud.  Era extremadamente raro que tuviera gripe o tos.

Y cuando los padeciera (siempre era por dejar de meditar por un tiempo), los síntomas eran leves y me sanaba pronto cuando volviera a meditar bien,

Esto era porque la meditación energética me daba un sistema inmune fuerte.

Al dejar de practicarla por largo tiempo, bajó la defensa y empecé a enfermarme.

La segunda razón de mi gripe recurrente era: estaba durmiendo menos que lo normal.

Un anuncio (¡poco ético!) de las máquinas de la mente decía que los usuarios podían reducir la necesidad de dormir hasta por 4 horas.

Efectivamente después de escuchar un cassette empecé a dormir menos.

Normalmente me levantaba a las 6 de la mañana.  Ahora despertaba espontáneamente a las 3 de la madrugada, y me levantaba contento para hacer ejercicios y trabajar.

Incluso veía algunos programas de TV (que raramente hacía porque no tenía tiempo).

Pensé ingenuamente: ¡Qué bueno!  Ahora tengo horas extras para ser productivo y disfrutar de la vida.

Pero luego me di cuenta de que esto era la causa del deterioro de mi salud.

Estaba durmiendo menos, no era porque el cassette tenía «efecto milagroso» de reducir mi necesidad de dormir.  La causa real era porque tenía ondas beta muy rápidas que estimulaban mi cerebro en forma excesiva; y producían insomnio.

Entonces no podía dormir bien y despertaba a las 3 de la madrugada.

Estaba durmiendo varias horas menos que lo normal, durante casi un año.

La falta de sueño afecta el sistema inmune.  Baja la defensa contra los virus de gripe.  Y afecta la capacidad de recuperación cuando uno se enferma. Según las explicaciones de Mayo Clinic.

Después de comprender las causas de mi gripes recurrentes, dejé de usar los dispositivos de máquina de la mente.

Volví a practicar la meditación energética ese mismo día.

Pronto recuperé mi excelente salud.

Pero no me deshice totalmente de la meditación electrónica, porque descubrí que era útil para ciertas personas.  Te explicaré:

Sonido gamma te mantiene despierto y enérgico

En el año 1994 empecé a enseñar meditación y técnicas de desarrollo mental a nivel internacional (puede ver mi historia aquí).

Tenía algunos alumnos que sentían mucho sueño cuando meditaban.

Recordé que el sonido de ondas beta rápidas tenía efecto estimulante que me hacía dormir menos.  Les hice probarlo. 

Y todos obtenía resultado satisfactorio: pronto dejaban de sentir somnolencia en la meditación.

Además sentían más despiertos y con más energía en sus actividades cotidianas.

Las personas somnolientas, con bajo nivel de energía, generalmente tienen sus ondas cerebrales anormalmente lentas.

Escuchar el sonido beta y gamma pueden ayudar a generar ondas cerebrales rápidas.

Al tener ondas cerebrales rápidas, uno siente más despierto y enérgico.

Puedes leer también el siguiente post para aprender algunas estrategias para estar más despierto y tener más energía: 

Cómo estar muy despierto y enérgico.

Para conocer más sobre las ondas cerebrales; y las ventajas de tener ondas gammas super-rápidas, puedes leer este post:

Mejoras tu cerebro optimizando tus ondas cerebrales

Conclusión

Existen diversos dispositivos electrónicos para alterar las ondas cerebrales mediante la luz y el sonido rítmicos.

Al cambiar las ondas cerebrales, puedes entrar en estados mentales específicos: relajación, serenidad, sueño, concentración, estado de alerta, etc.

No es necesario usar estos equipos para lograr la relajación, serenidad y dormir, porque puedes hacerlo fácilmente con las técnicas de meditación.

Pero recomiendo el uso del audio para inducir las ondas cerebrales Gamma, que son super rápidas, para las personas que tienen sus ondas cerebrales muy lentas.

Las ondas cerebrales lentas producen sueños, cansancio, y bajo nivel de energía.

Al acelerar las ondas cerebrales con el audio Gamma, uno puede sentir más enérgico y más despierto.

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Si has utilizado el audio Gamma, comparte tu experiencia en el Comentario abajo.

Si usas alguna música para ayudarte a relajar, dormir o lograr la concentración, deja un comentario para decirme qué tipo de música utilizas.