Si deseas mejorar tu memoria y recordar mejor cualquier cosa en los estudios o en la vida diaria, puedes aplicar las reglas que te enseñaré aquí.

Estas técnicas funcionan de inmediato.  Obtienes resultados si las aplicas.

Cuando deseas memorizar algo, aplica estas 5 reglas para grabarlo muy bien en tu cerebro:

1. Enfoca toda tu atención a lo que deseas recordar, y no te distraigas por otros asuntos

En una sola palabra: ¡concéntrate!

Si quieres retener una lectura, no dejes vagar tu Imaginación; no mires la mosca volando a tu lado; no revises tu celular.

Piensa sola en la cosa que quieres recordar.

Si practicas la meditación, mejoras tu concentración y tu capacidad de enfocar la atención.

Por tanto numerosos estudios científicos han mostrado que la meditación mejora la memoria.

Uno de ellos fue publicado en ScienceDirect. Dice que la práctica de meditación diaria de corta duración mejora la memoria (y otras facultades intelectuales) en los meditadores principiantes.

Si deseas aprender a meditar, ve a esta página.

Aun si no desearas meditar en forma habitual, te sugiero probar el ejercicio de Mejorar la concentración en un minuto.

Toma un solo minuto.  Mejora tu capacidad de concentración y productividad.

Si la practicas todos los días, mejorarás tu capacidad mental en general, incluyendo tu memoria.

Si te distraes mucho cuando estudias, prueba el Método Pomodoro, te enseña a estudiar con la concentración total.  Mejorará tu rendimiento en los estudios y recordarás mejor los materiales estudiados.

2. Utiliza diferentes sentidos

Si deseas recordar una palabra nueva o el nombre de una persona que acabas de conocer, escríbelos mientras los pronuncias en voz alta.

Con esto percibes una impresión muscular (al escribirlo y pronunciarlo), visual (al leerlos) y auditivo (al oírte pronunciarlos).

Los recordarás mejor porque entraron a tu cerebro por diferentes vías.

3. Divide el objeto para enfocar tu atención en cada parte

La mejor forma de recordar una cara es fijarte en los detalles de cada una de sus facciones: la forma de su frente, de sus ojos, de su nariz, de su boca, de su barbilla, de sus orejas, el color de su pelo, de su tez y de sus ojos, la forma de su cabeza, la expresión de su fisonomía, etc.

Otro ejemplo:

Estás viendo un coche en una tienda y deseas decirle a tu pareja que lo compre.  Enfócate en cada uno de los componentes del auto para observar sus detalles. 

Al llegar a la casa, podrás dar una descripción detallada de cada componente del auto a tu pareja, que se sorprenderá por tu buena memoria.

Incluso puedes aplicar este principio en la música:

Para recordar una pieza de piano, se puede estudiar en primer lugar la melodía (la parte cantante que por lo general se toca con la mano derecha).

Luego estudia la parte de acompañamiento, que se toca con la mano izquierda.

4. Entiende bien el material

Si es una poesía en idioma extranjero, debes comprender lo que significa cada una de sus palabras.

Si quieres recordar la forma de solucionar un problema en matemáticas o física, debes entender bien todos los pasos: saber por qué se hace de esta forma; de dónde viene esta ecuación; por qué se utiliza esta fórmula, etc.

5. Repite lo suficiente

La repetición es el recurso más empleado por los estudiantes que desconocen las técnicas avanzadas de memoria. Aunque no es muy inteligente, debemos concederle una cierta importancia y utilizarla cuando sea necesaria para complementar con las reglas anteriores.

Si te enseño tres palabras en chino, y las dices una sola vez.

¿Puedes recordar estas palabras mañana?

Posiblemente no.

Pero si repites cada palabra 10 veces, muy probablemente las recordarás al día siguiente, o incluso hasta varios días después.

Si deseas recordar algo, repítelo lo suficiente hasta estar seguro de que no lo olvidarás.

Para conservar bien un recuerdo, repásalo varias veces, a intervalos que se espaciarán cada vez más

Después de grabar una información en tu cerebro con las 5 reglas anteriores, podrás recordarla durante mucho tiempo.

Pero para asegurar que nunca la olvides, debes evocarla unas cuantas veces, para hacer más duradero el recuerdo.

Los intervalos entre las evocaciones deberán espaciarse cada vez más. Por ejemplo:

Hoy conociste una persona cuyo nombre no deseas olvidar; en la noche deberás tratar de recordar el nombre y reproducir (visualizar) en tu mente los rasgos fisonómicos de la persona; hazlo una vez más el día siguiente; otra vez 4 o 5 días después; otra vez al cabo de algunas semanas. Así el recuerdo será duradero.

Cuando memorizas una información, el recuerdo raramente será permanente.  La olvidarás si no la repasas nunca. 

Para convertir un recuerdo en permanente, debes repasarlo varias veces.

La forma más eficiente de repaso es hacerlo a intervalo cada vez más largo:

Después de aprender algunas palabras nuevas en un idioma extranjero, debes repasarlas varias veces: una vez al día siguiente; otra vez unos pocos días después; luego una semana después; un mes después, etc.

Memoriza en varias sesiones de corta duración

Estudia muchas veces, cada vez poco tiempo.

Si debes retener 20 fórmulas matemáticas en un día, no trates de dedicar 2 horas continuas para aprenderlas todas; procura estudiar a ratos perdidos, varias veces al día; y cada vez trata de retener 2 o 3 fórmulas solamente.

Mi hija Eugenia ganaba muchas veces los concursos de ortografía y de deletreo en inglés (spelling bee) en las escuela primaria y secundaria.

Utilicé varias estrategias para ayudarla en la preparación para estos concursos durante los primeros años.

Una de ellas era dictarle unas pocas palabras cada vez, pero varias veces por día.

Cuando la llevaba a la escuela, le dictaba 2 o 3 palabras en el auto.

Luego 2 o 3 palabras más cuando la traía de la escuela a la casa.

Cuando estábamos haciendo ejercicios o jugando en el parque, le dictaba dos palabras.

Cuando ella se iba a dormir, le dictaba quizás dos palabras (escogía las palabras difíciles que ella se había equivocado, para aprovechar el momento antes de dormir.  Verás explicaciones de esta técnica más abajo).

Cuando estábamos comiendo, le dictaba una o dos palabras.  No le disgustaba ni interfería con su comida, ya que eran tan sólo una o dos palabras, que ella contestaba en un instante muy breve.

Puedes utilizar esta estrategia para aprender las palabras nuevas si estás estudiando un idioma: lleva la lista de palabras contigo, o usa una aplicación en tu celular, para aprender unas pocas palabras cuando estás comiendo, cuando estás haciendo ejercicios, cuando estás sentado en el baño, cuando viajas en el auto, antes y después de dormir, etc.

Varía frecuentemente los temas de estudios

Si en un día debes estudiar inglés y matemáticas, dedica una hora a inglés, seguida por una hora a matemáticas, para luego volver a estudiar inglés, así sucesivamente.

Esto será más efectivo que si hubieras dedicado la mañana entera a inglés, y la tarde a matemáticas exclusivamente.

Después de estudiar una materia, procura que la siguiente sea muy diferente a la primera: después de álgebra, es mejor dedicarte a historia o español, en vez de geometría o física; ya que álgebra, geometría y física son similares (todas requieren razonamiento, lógica y uso de fórmulas).

Aprovecha el momento antes de dormir para fortalecer la memoria

Las cosas que pensamos en el momento antes de dormir son registradas profundamente en nuestro subconsciente (el “almacén” de los recuerdos); por tanto, podemos recordarlas fácilmente y durante mucho tiempo.

Es muy provechoso utilizar los minutos antes de quedarte dormido para fortalecer los recuerdos.
Hay dos formas de hacerlo:

1. Estudia justamente antes de dormir: Haz con las cosas importantes que deseas recordar bien.

Estúdialas (o repásalas si ya las estudiaste antes) antes de dormir.

Luego de estudiar, ve directamente a dormir (no hagas otras cosas para no interferir con las informaciones que acabas de registrar en tu mente), para que tu subconsciente procese y organice estas informaciones y las convierta en recuerdo duradero.

2.  Cuando estás acostado para dormir, repasa en su mente algunas cosas Importantes que quieres recordar bien: las explicaciones que dio el profesor sobre un teorema nuevo, un nombre científico largo que memorizaste hoy y temes olvidar pronto, algunas palabras nuevas que aprendiste en la clase de inglés, los nombres de varios clientes nuevos que conociste esta mañana, el texto del discurso que pronunciarás 3 días después, etc.

También puedes pensar en estas cosas cuando te acuestas para dormir la siesta, o antes de volver a quedarte dormido si despiertas en el transcurso del sueño nocturno.

El momento antes de dormir se llama estado theta:

Aprovecha el poder del estado theta como los genios. 

Después de aprender algo, utilízalo en la vida real

La mejor forma de recordar bien un vocabulario nuevo es emplearlo varias veces en la conversación cotidiana.

Después de aprender algunas palabras nuevas en un idioma extranjero, trata de utilizarlas conversando con un extranjero.

Si esto no es posible, habla a solas conversando con alguien imaginario.

Para recordar en forma permanente el nombre de una persona que acabas de conocer, trata de llamarla por su nombre tan frecuentemente como sea posible.

Enséñalo a alguien (puede ser imaginario) para asegurar que has aprendido bien

La mejor forma de asegurar que hayas dominado bien un tema es enseñarlo a otras personas.

Es difícil encontrar alguien a quien enseñas cada vez que aprendas algo; pero puedes hacerlo con una persona imaginaria.

Después de aprender un tema, explícalo en voz alta como si estuvieras enseñando a alguien sentado a tu frente.

Al hacerlo, aseguras que has comprendido bien los materiales estudiados, además ayuda a recordarlos.

Tip muy útil: Cuando estás enseñando a alguien (real o imaginario), puedes grabarlo con tu celular.

Luego podrás escuchar estas grabaciones cuando estás haciendo ejercicios, comiendo o viajando en el auto.

Esto sirve de repaso, y ayuda a recordar aún más el material aprendido.

Conclusión

Para mejorar tu memoria, sigue estos consejos:

1. Enfoca toda la atención a la cosa que deseas recordar. ¡Concéntrate!

2. Utiliza varios sentidos para grabar la información en tu mente.

3. Divide el objeto para enfocarte en cada parte pequeña.

4. Entiende bien el material que deseas memorizar.

5. Repite lo suficiente para asegurar no olvidar.

6. Repasa lo aprendido varias veces, a intervalos que se espaciarán cada vez más.

7.  Estudia muchas veces, cada vez de corta duración.

8. Varía frecuentemente los temas de estudios.

9. Utiliza el momento antes de dormir para fortalecer la memoria.

10. Utiliza en la vida real lo que aprendiste.

11. Enseña a alguien (puede ser imaginario) para asegurar que has dominado bien el tema.

En este video puedes ver una explicación audiovisual de las técnicas para mejorar la memoria:

¿Cuáles de estos consejos te resultan más efectivos?

¿Has utilizado o conoces otras técnicas de memoria?

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